Hoy en día alquilar no es tan sencillo como antes, la nueva ley de arrendamientos urbanos, la excesiva oferta y los altos precios han volteado un mercado que hasta hace bien poco era de los más productivos. Inmonet ha observado a lo largo de estos años un cambio fundamental en los alquileres que se traduce en que un piso se tarda mucho más en alquilar.
Un propietario desea un buen inquilino, por ello se afana en conseguir documentos que acrediten la buena conducta del inquilino: aval bancario, contrato de trabajo y una mensualidad por adelantado. De igual manera se está rehusando a contratar extranjeros en España. Los propietarios, influenciados por malas experiencias o rumores, deciden encontrar trabajadores españoles únicamente.
Pero ¿Qué ocurre si el propietario se da cuenta que ha errado al alquilar el piso a esos inquilinos concretos? ¿Qué puede hacer? La ley de arrendamientos urbanos protege al inquilino el cual puede permanecer en el piso mientras no se demore 2 meses en el pago o incurra en alguna otra causa como realizar actividades ilegales en el piso, para lo cual debe mediar atestado policial.
Por ello, lo que algunos propietarios han decidido llevar a cabo es un contrato privado por el cual, el propietario cede el uso de la vivienda al inquilino durante un mes a cambio de una cantidad de dinero. Sería una especie de contrato de temporada finalizado el cual, si el propietario lo desea, puede dejar que el inquilino permanezca en el piso por un tiempo de arrendamiento normal.
Los inquilinos no suelen poner pegas a este contrato de temporada "de prueba", al contrario de lo que se pensó en un comienzo y se logran resultados beneficiosos para mabas partes.
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